sábado, 11 de julio de 2009

Tren rigurosamente vigilado


El Jefe, PIT II, o Paco Igancio Taibo II, presenta a la prensa, en el vagón "usos múltiples" el libro "Buscando a Belarmino Tomás", junto a su autor Jorge Belarmino Fernández. La cara de Paco no refleja odio, ira o algo por el estilo; es así nomás cuando se entusiasma.

Alonso Cueto (Lima) y Guillermo Martínez (Buenos Aires) se chamullaron tres bibliotecas y un par de cines en el vagón "no fumadores".



Guillermo Saccomano (Buenos Aires) en un momento de profunda meditación trascendental en el vagón "fumadores", tan profunda y tan parecida a la siesta que cualquiera se confunde.




Ernesto Mallo, platense 100 por 100, cuando fue sorprendido, en la estación de Mieres, donde el tren hizo un alto para unas sidras, tratando de camelarse a una de las gaiteras. Dicen que dijo, no nos consta: ¡Cómo soplan, yo quiero una!
Seguiremos informando.

martes, 7 de julio de 2009

Pudores y agradecimientos

Ella me dice:
-¿Le has agradecido a Orsi que te dedicara “Ciudad Santa”?
Y me quedo como un boludo, porque nunca leo ni prólogos ni dedicatorias.
Recurro al libro y ahí está: “A Raúl Argemí, Carlos Balmaceda, Juan Ramón Biedma y Alejandro Gallo, por orden alfabético, como en los créditos cinematográficos”.
Entonces me pregunto qué habría hecho si lo hubiera sabido desde el principio. Difícil afirmarlo, pero... no sé si hubiera sido tan entusiasta en el elogio del libro. Cosas del pudor de barrio, supongo.
Por suerte no es más que especulación trasnochada, porque lo hecho, hecho está.
Lo que queda es dar las gracias. Por asociarme a tan buena novela y por sumarme a tan buena compañía. Con una línea media como esta me animo a hacerle partido a cualquiera.
Gracias, flaco, de todo corazón.